La Ley Jacinta, originalmente orientada a aumentar las exigencias para personas mayores de 65 aรฑos que soliciten o renueven su licencia de conducir, ha sufrido modificaciones significativas para abordar preocupaciones sobre discriminaciรณn por edad. Esta iniciativa se inspira en un trรกgico incidente donde Jacinta, una niรฑa de 5 meses, falleciรณ tras ser atropellada por un conductor de 80 aรฑos.
Cambios en el Proyecto de Ley
El proyecto modificado exige que todas las personas, independientemente de su edad, que deseen renovar o solicitar su licencia de conducir presenten un certificado mรฉdico. Este certificado debe demostrar que no padecen enfermedades que limiten sus capacidades motoras o fรญsicas para conducir.
Si el postulante padece alguna enfermedad relevante, el mรฉdico deberรก constatar que estรก en tratamiento y que aรบn es apto para la conducciรณn. En casos donde la deficiencia de la persona no sea grave, se podrรก otorgar una "licencia de conductor no profesional restringida".
Contexto y Repercusiones
Expertos y parlamentarios expresaron preocupaciones de que la ley original, al enfocarse solo en mayores de 65 aรฑos, podrรญa ser discriminatoria. Se alcanzรณ un consenso para modificar el proyecto y aplicar las exigencias de forma igualitaria a todas las edades.
La ley busca prevenir accidentes como el que resultรณ en la muerte de Jacinta, asegurando que todos los conductores sean mรฉdicamente aptos para manejar.
Reflexiรณn
La Ley Jacinta resalta la importancia de garantizar la seguridad vial a travรฉs de una evaluaciรณn adecuada de la aptitud de los conductores. Las modificaciones buscan equilibrar la necesidad de prevenir accidentes con el principio de no discriminaciรณn, destacando la importancia de un enfoque inclusivo y justo en la legislaciรณn de trรกnsito.