La Comisión de Diputados y Senadores encargada de zanjar las diferencias en el proyecto de ley que crea el servicio de biodiversidad y áreas protegidas no logró llegar a un consenso este lunes. El punto de discordia clave se centró en la prohibición de entregar concesiones para criar peces exóticos en las áreas protegidas, medida propuesta por el gobierno.
El debate generó posturas encontradas entre quienes apoyan la protección del medio ambiente y quienes defienden la importancia de preservar los empleos, especialmente en la Industria de los Salmones. Antes de la sesión de la comisión mixta, el gobierno tenía cierto optimismo. Sin embargo, durante la votación de la indicación, se produjeron tres empates con cinco votos a favor y cinco en contra, lo que según el reglamento se considera un rechazo a la propuesta del Ejecutivo.
Esta situación representa una derrota para el gobierno y una victoria momentánea para la industria, ya que el tema continuará siendo debatido en el futuro proyecto de ley de acuicultura, el cual aún debe presentarse para su trámite legislativo. Este escenario político refleja la presión ejercida por los trabajadores y la industria, quienes buscan proteger los empleos en el sector.
A pesar de esta controversia, el proyecto de ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas seguirá su curso legislativo sin la polémica indicación que generó la masiva movilización de trabajadores de la Industria Salmonera en varias regiones del país.
