La exclusión de la Antártica chilena como territorio especial en el anteproyecto de la Constitución ha generado controversia y críticas por parte de la Comisión Experta. Esta decisión también afectó a Rapa Nui y el Archipiélago Juan Fernández. Ahora, el enfoque está en el Consejo Constitucional, donde se espera que se corrija este error y se incluya a la Provincia Antártica Chilena, que abarca desde el sur del lago Fagnano hasta el Polo Sur.
Los límites de esta Provincia son geopolíticamente significativos, ya que Chile es el país más cercano a la Antártica, comparte sus costas y un entorno ambiental, formando una unidad indivisible que el Estado debe reconocer y proteger. Esto es especialmente relevante debido al creciente interés de grandes potencias en la región antártica y la fragilidad del consenso antártico.
El respaldo a la exclusión de la Antártica por parte de la Cancillería ha sido cuestionado, dada su tolerancia a transgresiones en tratados y avances de otros países en la plataforma continental. Esta desconexión de la política exterior con la región ha preocupado a quienes representan a Magallanes, quienes buscan proteger los intereses territoriales.
Es crucial corregir esta omisión y atender al interés nacional mediante su reconocimiento y promoción constitucional, respetando los tratados vigentes. Fortalecer el vínculo con la Antártica y defender la integridad territorial es de suma importancia, como expresó el presidente Gabriel Gonzalez Videla en un histórico discurso en 1948. La enmienda constitucional se ve como una oportunidad fundamental para salvaguardar los intereses nacionales en la región antártica.
