La temporada de caza en Chile comienza en abril en todo el país, siguiendo la Ley de Caza y su reglamento, que establecen criterios según las especies y zonas del país. Sin embargo, se ha detectado la presencia del virus de la Influenza Aviar H5N1 en aves migratorias provenientes del hemisferio norte, afectando a varias regiones del país, incluyendo la zona norte. Este virus ha tenido un impacto negativo en la biodiversidad, especialmente en la fauna silvestre marina.
El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) ha tomado medidas para controlar la propagación del virus, realizando muestras y erradicando aves de traspatio y aves de la industria que han resultado positivas. Aunque se han detectado casos en varias regiones del país, hasta la fecha no se han registrado casos positivos en la industria avícola a nivel nacional.
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En la Región de Magallanes, la suspensión de la caza no interrumpe el proceso de otorgamiento de permisos de caza menor o mayor, pero se prohíbe la caza de ciertas especies especificadas en el reglamento, como el Yeco, Caiquén, Canquén, Pato juarjual, Pato real, Pato jergón grande, Pato jergón chico, Traro, Zorzal y Jilguero. Sin embargo, no se ve afectada la caza de especies consideradas perjudiciales o dañinas, como liebres y conejos.
El SAG hace un llamado a la ciudadanía a no tocar ni mover aves enfermas o muertas, y a los dueños de aves de corral a extremar las medidas de bioseguridad en sus instalaciones para prevenir el contagio de sus aves con la influenza aviar altamente patógena. En caso de sospecha de síntomas o mortandad en aves, se insta a contactar de inmediato al SAG a través de diferentes canales de comunicación, como oficinas del SAG, teléfono, WhatsApp o correo electrónico. Para obtener más información, se puede visitar el sitio web del SAG o escribir al correo de contacto de la Región de Magallanes.
