Este miércoles, el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Punta Arenas dictó sentencia contra Andrés Pérez y su pareja, Joseline Riesco Vera, por el delito de tráfico de drogas. Pérez recibió una pena de 10 años y un día de presidio efectivo, mientras que Riesco Vera fue condenada a 5 años y un día, pena que cumplirá bajo el régimen de libertad vigilada.
El abogado defensor Marcos Ibacache explicó que ambos fueron imputados bajo la Ley 20.000, en el artículo 3, relacionado con tráfico de drogas. El tribunal consideró que Pérez tenía una mayor participación en los hechos, lo que resultó en la pena más severa. Por su parte, la condena más leve para Riesco Vera se basó en la menor implicación demostrada durante el juicio.
Marcos Ibacache, abogado defensor: "El tribunal entendió que respecto de don Andrés Pérez había mérito para condenarlo por dichos delitos y lo sancionó a una pena de 10 años y un día de presidio mayor en su grado medio, que deberá cumplir en forma efectiva. En el caso de la coimputada Joseline Riesco Vera, se acogieron los argumentos de la defensa respecto de su menor participación, condenándola a 5 años y un día, bajo el régimen de libertad vigilada."
Antecedentes de los condenados
- Andrés Pérez: Contaba con antecedentes penales previos, aunque no relacionados con tráfico de drogas. Esto fue considerado por el tribunal como un factor agravante.
- Joseline Riesco Vera: Una joven de nacionalidad colombiana sin antecedentes penales previos, quien, según su abogado defensor, era una estudiante que se involucró en el delito tras conocer a Pérez.
Marcos Ibacache, abogado defensor: "La defensa logró demostrar que doña Joseline no tenía antecedentes penales y que era una joven estudiante que lamentablemente se vio involucrada en estos hechos al conocer a mi otro representado. Por ello, se le aplicó una pena menor, sustituida por libertad vigilada."
- Andrés Pérez cumplirá su condena de 10 años y un día de manera efectiva.
- Joseline Riesco Vera estará bajo la supervisión de Gendarmería a través de un delegado encargado de verificar el cumplimiento de su libertad vigilada.