A pocos días de la inauguración del tradicional árbol de Pascua de EDELMAG, el espíritu navideño comienza a despertar en Punta Arenas. Los negocios de empaquetado de regalos, el bullicio en las tiendas y el inicio de las compras festivas anuncian la llegada de las celebraciones. Sin embargo, algo parece faltar: la ornamentación característica que solía engalanar las principales arterias de la ciudad en años anteriores.
A diferencia de otras temporadas, las calles de Punta Arenas, como la emblemática calle Bories, permanecen sin decoraciones alusivas a la Navidad. Esta ausencia ha llamado la atención de los ciudadanos y locatarios, quienes extrañan los colores y luces que daban vida al centro de la ciudad durante estas fechas.
El concejal de Punta Arenas, José Becerra, ha vuelto a poner sobre la mesa esta inquietud, recordando que ya el año pasado había solicitado mayor atención a este aspecto. Por su parte, los comerciantes del centro han manifestado su descontento ante la falta de ornamentación, señalando que esta omisión impacta negativamente en el ambiente navideño y, en consecuencia, en la afluencia de compradores.
Los puntarenenses también han expresado su opinión, recordando con nostalgia cómo en años anteriores la ciudad se vestía de luces y decoraciones que contribuían a generar un ambiente festivo único en la región.
En un momento en que el comercio y las actividades locales necesitan un impulso, muchos se preguntan: ¿Por qué no hacer un esfuerzo adicional para devolver el brillo navideño a nuestras calles? La decoración no sólo embellece, sino que une a la comunidad y fortalece el sentido de pertenencia.
Mientras tanto, los habitantes de Punta Arenas esperan que esta observación sea escuchada y que en los próximos días, el espíritu navideño no sólo se sienta en los hogares, sino también en las calles que representan el corazón de la ciudad.