El descontento entre los habitantes de Puerto Williams ha crecido tras el reciente desbordamiento en la captación de agua del río Róbalo. Este incidente, provocado por intensas lluvias y deshielos el pasado 14 de mayo, obstruyó la bocatoma y dejó a la población sin suministro de agua potable durante una semana.
El martes 14 de mayo, el desbordamiento del río Róbalo obstruyó la captación de agua, lo que causó una grave crisis sanitaria en Puerto Williams. El suministro de agua potable fue interrumpido, y las autoridades de salud emitieron recomendaciones sanitarias el 20 de mayo para prevenir infecciones y garantizar el uso seguro del agua.
El 22 de mayo, se logró producir agua potable con mayor estabilidad, permitiendo recuperar progresivamente las reservas en E
Domingo Molina, un habitante de Puerto Williams, expresó su frustración en las redes sociales, criticando la falta de acción preventiva y la infraestructura obsoleta. "El problema es que no es la primera vez que llueve intensamente, las instalaciones colapsadas tienen un montón de años. Era cosa de tiempo que esto colapsara," escribió Molina, también señalando la problemática de los castores y la gestión del afluente por el organismo de estudios científicos Omora y un privado.
La Junta de Vecinos N°1 de Puerto Williams exigió respuestas y compensaciones por los inconvenientes causados. A través de cartas enviadas al gobernador Jorge Flies y a Aguas Magallanes, los dirigentes vecinales destacaron la necesidad de garantizar servicios sanitarios adecuados y prevenir futuras emergencias similares.
El alcalde de Porvenir, Patricio Fernández, lamentó que no se hubieran tomado medidas preventivas adecuadas a pesar de la rápida respuesta de las autoridades. Por su parte, Aguas Magallanes anunció que descontará los días sin suministro del pago de las boletas y organizó el traslado de 200 mil litros de agua potable a la zona mediante un ferry de la empresa Tabsa y una embarcación de la Armada.