La Dirección Regional de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas (MOP) Magallanes y el Servicio Nacional de Geología y Minería (SERNAGEOMIN) han firmado un convenio de colaboración que permitirá robustecer el monitoreo del Río Las Minas. Este acuerdo contempla la integración de tres estaciones del SERNAGEOMIN a la red hidrométrica regional administrada por la DGA.
El convenio abarca la adquisición e instalación de instrumental, la transferencia de datos, y la calibración y mantenimiento de las estaciones Loreto, Laurita y Río Las Minas en Fortuna, las cuales miden variables como nivel y velocidad de flujo del agua. Esto complementará las capacidades actuales de la DGA, que ya cuenta con cuatro estaciones en la cuenca del Río Las Minas.
Lorena Olivares, directora regional de Aguas, explicó que esta colaboración permitirá compartir métodos y tecnologías para monitorear en tiempo real variables clave como nivel y caudal de agua, precipitaciones, temperatura, humedad y altura de nieve. Además, los datos recopilados se registrarán en el Banco Nacional de Aguas de la DGA, lo que facilitará el acceso a información actualizada para una mejor gestión del río.
La red hidrométrica de la DGA en el Río Las Minas incluye:
- Estación fluviométrica Río Las Minas Bt. Sendos, que mide caudal, temperatura del agua, precipitaciones y viento.
- Estación meteorológica Magdalena Giglio 2, que registra temperatura del aire, humedad y precipitación.
- Estación meteorológica Cerro Mirador, que además de las variables anteriores mide radiación solar y altura de nieve.
- Estación urbana Río Las Minas en Punta Arenas, que monitorea la altura del agua.
Con la integración de las estaciones del SERNAGEOMIN, se incrementará la capacidad de monitoreo, proporcionando datos en línea bajo los estándares de la DGA para optimizar la gestión hídrica en la región.
El Seremi de Obras Públicas, José Luis Hernández, destacó que el fortalecimiento de la Red Hidrométrica Nacional es esencial para informar a organismos como COGRID, SENAPRED y municipios sobre eventos críticos, como crecidas o escorrentías. Esto permitirá tomar medidas preventivas para proteger a la población y los bienes públicos y privados.