Tras más de cuatro años de diligencias, el fiscal regional de Magallanes formalizó el cierre de la investigación sobre la tragedia del Hércules C-130 de la Fuerza Aérea de Chile (FACH), que capotó en el Paso Drake el 9 de diciembre de 2019, dejando 38 víctimas fatales. Alicia Quiñones, madre de Ítaro Medina Quiñones, uno de los tripulantes fallecidos, se refirió al proceso y a la lucha de las familias por obtener justicia.
"La causa ya debía estar cerrada en diciembre del año pasado. Sin embargo, los abogados de los posibles culpables pidieron una prórroga, la cual está por expirar en estos días", señaló Quiñones, refiriéndose a los retrasos en el proceso judicial.
Con el cierre de la investigación, las hipótesis sobre las causas del siniestro serán expuestas en el juicio oral, cuya fecha aún no ha sido determinada. Mientras tanto, las familias han seguido el caso de cerca con el fiscal regional Cristián Crisosto, a quien destacan por mantenerlos informados. "Él ha tenido un contacto permanente con nosotros, organizando reuniones por Zoom para explicar los avances del caso, lo cual también es mérito de nuestros abogados", agregó Quiñones.
Si bien la madre reconoce que la justicia chilena ha estado presente en el proceso, no tiene la misma opinión sobre la FACH y su alto mando. "Me dio pena, rabia y hasta risa la respuesta que dieron, porque parecía una excusa para niños. A mí me mataron a mi hijo, y el alto mando de 2019 mató a 37 personas más", expresó con indignación.
Las familias de las víctimas siguen a la espera de que el tribunal fije la fecha para el juicio oral, en el que se determinará la responsabilidad de los siete formalizados en el caso.
