Esta mañana, la Municipalidad de Punta Arenas junto a Carabineros y la Policía de Investigaciones (PDI), sostuvieron una reunión para coordinar un plan de fiscalización destinado a enfrentar el problema de las fiestas y locales clandestinos que afectan a la ciudad. Durante el encuentro, las autoridades discutieron medidas concretas para abordar las denuncias presentadas por vecinos y garantizar la seguridad de la comunidad.
A partir de esto, el alcalde de la comuna, Claudio Radonich, detalló que actualmente se han recibido cuatro denuncias formales sobre este tipo de actividades en diferentes sectores de la ciudad. “Lo que buscamos es terminar con los clandestinos. Hoy la ley no está actualizada y esto dificulta mucho el proceso de clausura. Hemos tenido casos como el de un local cerca de la Plaza Sampaio, el cual tardamos mucho en cerrar, es por esto que hago un llamado a los parlamentarios a modernizar las normativas, porque los clandestinos no solo operan fuera de la ley, sino que también generan riesgos graves para quienes asisten a ellos”, señaló la autoridad local.
Por su parte, Francisco Arévalo, capitán de la Primera Comisaría de Carabineros, indicó que las rondas de fiscalización comenzarán este próximo viernes en los puntos denunciados.
En este mismo sentido, el comisario de la PDI, Cristian Álvarez, afirmó que su institución trabajará desde el área investigativa, revisando las denuncias y cotejando datos sobre los locales clandestinos. “También estamos enfocados en el control de extranjeros y en coordinar las acciones necesarias para abordar este problema”, aseguró el detective.