Con el objetivo de fortalecer la red oncológica de la región, la Secretaría Regional Ministerial de Salud y el Servicio de Salud Magallanes llevaron a cabo la Primera Jornada Regional de Cáncer. Este encuentro se centró en reforzar los conocimientos y la coordinación en los distintos niveles de atención de salud, en el marco de los nuevos Planes Nacionales de Cáncer para adultos e infanto-adolescentes.
La jornada abarcó desde la promoción de estilos de vida saludables hasta el diagnóstico temprano, tratamiento y seguimiento de casos. La Seremi de Salud, Francisca Sanfuentes, subrayó la relevancia de estas iniciativas: "el cáncer es una de las principales causas de mortalidad en nuestra región. Esta jornada reunió a equipos de atención primaria, secundaria y estudiantes de carreras de salud, con un enfoque en prevención y promoción. Además, hemos incorporado formalmente a agrupaciones comunitarias de Punta Arenas y Puerto Natales para que presenten sus actividades."
Sanfuentes destacó que los cánceres más comunes en la región son los gastrointestinales (gástrico, de colon y rectal) y el cáncer de mama, y enfatizó la importancia del tamizaje y controles preventivos para detectarlos en etapas tempranas, lo que permite iniciar tratamientos oportunos.
Ariela Vera, jefa del Departamento de Integración y Gestión de la Red del Servicio de Salud Magallanes, explicó: "era crucial reunir a los equipos de todos los niveles para abordar un problema tan relevante como el cáncer, que junto con las enfermedades cardiovasculares, representa una de las mayores causas de mortalidad en la región. La jornada permitió revisar estrategias en promoción, diagnóstico y rehabilitación."
La Dra. Paula Loyola, jefa de la Unidad de Oncología Infantil del Hospital Clínico Magallanes, hizo hincapié en la importancia de recordar que el cáncer también afecta a los niños.
"Aunque suele asociarse más a los adultos, en los niños los cánceres más comunes son la leucemia, los tumores del sistema nervioso central y los linfomas. Un diagnóstico temprano puede garantizar una sobrevida del 80%, e incluso del 100% dependiendo del tipo de cáncer."
Loyola instó a los padres a acudir regularmente a controles sanos, donde se pueden detectar síntomas atípicos como palidez, lesiones en la piel o inflamación persistente de ganglios linfáticos.