En medio de una ola de inclemencias climáticas, tanto el transporte terrestre como el aéreo se vieron gravemente afectados en la ciudad de Punta Arenas.
La empresa de buses Sur informó que debido a las intensas nevadas, el último bus con destino a Natales y viceversa tuvo que suspender su servicio a las 17:15 horas del día de hoy. Esta medida fue tomada para salvaguardar la seguridad de los pasajeros y evitar incidentes en las complicadas condiciones de la carretera.
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Además, en el Aeropuerto Carlos Ibáñez del Campo de Punta Arenas, todos los vuelos programados fueron cancelados debido a un factor climático inesperado. Durante la madrugada de hoy, cientos de pasajeros a bordo del vuelo Latam LA081, así como aquellos que esperaban partir hacia Santiago en el vuelo de retorno, tuvieron que enfrentar una larga espera y complicaciones.
Según el reporte oficial de la DGAC (Dirección General de Aeronáutica Civil), las condiciones meteorológicas adversas llevaron a emitir una Notificación Aeronáutica (Snowtam) que alertaba sobre la presencia de escarcha en tres pistas del aeropuerto. En respuesta a esta situación, se procedió a aplicar anticongelante a la pista principal para permitir el aterrizaje seguro de las aeronaves.
Sin embargo, durante el proceso de aterrizaje del vuelo Latam LA081 a las 12:25 horas, se produjo un incidente inesperado. A pesar de las instrucciones entregadas desde la Torre de Control para dirigirse hacia la plataforma, el piloto optó por continuar por una de las pistas sin tratamiento, lo que ocasionó un problema que requirió la intervención del Servicio de Salvamento y Extinción de Incendios del aeropuerto.
Las labores para habilitar la pista y garantizar un desembarque seguro del avión llevaron cerca de cuatro horas. Durante este tiempo, los pasajeros a bordo del vuelo Latam LA081 tuvieron que permanecer en el avión, mientras que aquellos que esperaban embarcar en el vuelo de retorno a Santiago también se vieron afectados.
Finalmente, el vuelo de retorno, que originalmente estaba programado para despegar a las 2:07 de la madrugada, fue reprogramado para las 10:27 horas del mismo día.
Latam Airlines Group emitió una declaración asegurando "que la aeronave no sufrió desperfectos y que en ningún momento se puso en riesgo la seguridad de los pasajeros. Además, lamentaron las molestias ocasionadas por esta situación climática ajena a su responsabilidad, reafirmando su compromiso inquebrantable con la seguridad y los estándares operacionales".