Bajo el eslogan "Justicia por mi Casa", doña Rosa Sepúlveda Ruiz hace un llamado urgente a la comunidad en busca de apoyo, alegando que un ex empleador la engañó para que firmara la entrega de su casa, aprovechándose de su condición de analfabeta.
Con mucho esfuerzo, Rosa Sepúlveda Ruiz logró adquirir una casa propia para ella y sus hijos. Su vida no ha sido fácil, especialmente a la hora de conseguir empleo, dado que es analfabeta. Esta vulnerabilidad la llevó a la situación que hoy enfrenta. Rosa asegura que, aprovechándose de su incapacidad para leer y escribir, un ex empleador la hizo firmar documentos de compra-venta de su vivienda, haciéndola ceder la propiedad sin saberlo.
El traspaso de la propiedad habría ocurrido en 2015, pero Rosa no descubrió la verdad hasta 2019, cuando se enteró de que su vivienda ya no estaba a su nombre. Según su relato, la estafa fue perpetrada por su ex empleador, quien transfirió la propiedad a sus propios hijos.
En su intento por recuperar su hogar, Rosa contrató a un abogado, pero lamentablemente le informaron que habían perdido el caso en tribunales.
Actualmente, los nuevos propietarios de la vivienda han emitido una orden de desalojo para que Rosa y su familia abandonen la casa a principios de la próxima semana. Frente a esta inminente amenaza, Rosa, con el apoyo de sus vecinos de la población Archipiélago de Chiloé, en Punta Arenas, espera poder llevar nuevamente su caso a los tribunales en busca de justicia.
