En un esfuerzo por combatir el desperdicio de alimentos y ayudar a quienes más lo necesitan, el Microbanco de Alimentos ha logrado beneficiar a casi 60 personas en Magallanes. Este innovador proyecto, en colaboración con fruterías locales, busca aprovechar aquellos alimentos que no son vendidos debido a su aspecto o a pequeños defectos, redirigiéndolos hacia comunidades vulnerables.
Conscientes del alto índice de desperdicio alimentario en hogares y establecimientos comerciales, la Corporación Observatorio del Mercado Alimentario (Codema) ha liderado esta iniciativa a nivel nacional, enfocada en redistribuir estos productos a quienes más lo necesitan.
En Magallanes, el Microbanco de Alimentos trabaja activamente con dos fruterías locales, aprovechando su colaboración para recolectar los alimentos que de otra manera serían descartados. Esta alianza ha permitido canalizar una considerable cantidad de frutas y verduras hacia comunidades en situación de vulnerabilidad, beneficiando así a familias enteras.
Para aquellas personas o empresas interesadas en contribuir a esta noble causa, pueden ingresar al Instagram @microbancodealimentoscodema, para obtener más información sobre cómo colaborar y hacer una diferencia en la comunidad.