La estructura del puente colgante Guarda en la segunda quebrada del Parque Nacional Torres del Paine ha sufrido un grave daño, poniendo en riesgo la operatividad del Circuito Macizo Paine. Los tensores del puente fueron cortados, lo que ha generado una situación de alto riesgo y ha comprometido la seguridad del sendero.
Guardaparques del parque han expresado su preocupación y frustración por la situación. "Es difícil tratar de explicar con palabras lo que uno siente al estar involucrado estrechamente. Mis compañeros y yo hemos trabajado arduamente aquí, apoyando incluso a los voluntarios estadounidenses que estuvieron trabajando en el Puente Guarda en la segunda quebrada," señaló uno de los guardaparques.
El guardaparque explicó que el daño se debe a un fenómeno de remoción en masa de gran magnitud que torció las torres del puente, provocando el corte de los tensores y el efecto vaivén que ha deformado la estructura. "No soy experto en puentes colgantes de tipo tibetano, pero el sentido común dice que el circuito Macizo Paine no va a estar operativo ni esta temporada ni la próxima. Hay mucho trabajo que hacer por acá," añadió.
Se ha propuesto un plan de acción en etapas, comenzando con la transparencia de la situación a través de un punto de prensa. Conaf necesita informar a la comunidad sobre las acciones que se están tomando y demostrar que están preocupados y ocupados en buscar soluciones. La siguiente etapa implicará la consulta y colaboración con expertos en remoción de masas y especialistas en avalanchas para garantizar condiciones seguras de trabajo.
“No estamos de acuerdo con el cierre del circuito Paine, ya que hay comunidades locales que viven de la industria del turismo, y antiguamente, donde se encuentra la segunda quebrada, y el puente Guardas, se encontraba un sendero alternativo, que se podría usar y mejorar a corto plazo. Por lo tanto, hay alternativas para encontrar una solución para no cerrar el turismo”, resaltó Natalia Ávila, directora de la Asociación Gremial de Guías Locales de Puerto Natales AGGNat.
Además, se requiere la intervención de un experto en puentes del servicio de parques o del servicio forestal para realizar una evaluación técnica exhaustiva. "Prácticamente hay que cambiar toda la estructura por una de seguridad. Los anclajes están todos torcidos," comentó el guardaparque, quien también recordó que la construcción del puente tomó dos temporadas.
"La naturaleza nos está enviando un mensaje. Tal vez es tiempo de reflexionar, tomar la vida con calma y buscar soluciones sostenibles para el beneficio de todas las personas y mantener la seguridad," concluyó el guardaparque.