En el marco del proceso de dinamización de la Hoja de Ruta en Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (CTCI), diversas autoridades y representantes del ámbito científico, económico y medioambiental se reunieron en Punta Arenas para fortalecer el enfoque en la conservación de los ecosistemas marinos y de agua dulce en la Macrozona Austral.
La instancia fue convocada por el Instituto de Fomento Pesquero (IFOP) y el Nodo Ciencia Austral, y consistió en el taller “Hoja de Ruta CTCI: Fortaleciendo la conservación de los ecosistemas acuáticos en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena”. El evento congregó a actores clave como la seremi de Ciencia, Verónica Vallejo; la seremi de Economía, Marlene España; el seremi del Medio Ambiente, Enrique Rebolledo; así como representantes de CONAF, Sernapesca, IFOP y la Dirección Zonal de Pesca y Acuicultura.
Durante la jornada, se trabajó de forma práctica y participativa en la identificación de desafíos y oportunidades para la conservación de los ecosistemas acuáticos, además de avanzar en la definición de hitos y metas específicas para la implementación regional de la Hoja de Ruta CTCI, planificada al año 2030. “La Hoja de Ruta permite articular a diversos actores, conectar las necesidades de investigación científica con los requerimientos del desarrollo productivo y social, y en una próxima etapa, incluir a los usuarios finales”, explicó Eduardo Barros, profesional del Nodo Ciencia Austral y del Centro Internacional Cabo de Hornos (CHIC).
Uno de los ejes estratégicos más relevantes abordados es el de los ecosistemas acuáticos, dado el contexto geográfico de la región. “Estamos en una macrozona donde más de la mitad del territorio es maritorio. La ciencia en oceanografía y biología marina es clave, y el trabajo del IFOP liderando esta sesión es fundamental para avanzar en la actualización de la Hoja de Ruta”, destacó la seremi de Ciencia, Verónica Vallejo.
Desde IFOP, su director regional Erik Daza valoró la jornada como una oportunidad para vincular el conocimiento científico con las políticas públicas. “Los servicios públicos han manifestado necesidades específicas donde la investigación puede contribuir significativamente: estudios sobre recursos hidrobiológicos, especies invasoras, hidrógeno verde, contaminación marina y servicios ecosistémicos, entre otros”, indicó.
En esta línea, el director zonal de Pesca y Acuicultura, Bernardo Pardo, sostuvo que el Nodo Ciencia Austral se posiciona como una plataforma estratégica. “Este Nodo no solo propone proyectos, sino que articula voluntades y responsabilidades institucionales para una conservación efectiva con enfoque regional. Es momento de consolidar una estrategia científica con mirada de largo plazo para Magallanes”, enfatizó.
El trabajo realizado será clave para seguir construyendo una hoja de ruta que articule el conocimiento científico y técnico con las decisiones públicas, fortaleciendo así el desarrollo sustentable de los ecosistemas acuáticos en la región.