Este viernes, la Universidad de Magallanes (UMAG) llevó a cabo su cuenta pública correspondiente al año 2024. Durante la instancia, el rector José Maripani abordó los logros y desafíos de la institución, destacando el complejo escenario financiero que persiste desde el año anterior.
En su intervención, Maripani reconoció que las dificultades económicas no han variado significativamente, aunque destacó que la universidad se mantiene plenamente operativa. “La situación financiera de la universidad no ha cambiado desde que nos acreditaron. SENESCYT tenía muy clara nuestra situación, y ellos están atentos a nuestro avance en estabilidad financiera. A pesar de todo, estamos funcionando completamente operativos y con una junta directiva empoderada que guía nuestras acciones”, señaló el rector.
Por su parte, Víctor Briano, integrante del consejo directivo de la UMAG, reafirmó el compromiso institucional para enfrentar las dificultades a través de un plan de sostenibilidad: “tenemos problemas, y son de conocimiento público, pero estamos trabajando para superarlos, como lo hemos hecho en el pasado”, indicó Briano.
Los costos operativos y administrativos de la UMAG superaron los 30 mil millones de pesos en 2023, una cifra que refleja la magnitud del desafío económico. Este panorama se agrava por las bajas tasas de matrícula en los programas de postgrado, que se mantienen en niveles críticos.
Pese a este escenario, el rector Maripani expresó su optimismo respecto al aumento en la ocupación de cupos en carreras profesionales. “Creemos que este año lograremos buenas noticias en cuanto a la matrícula de nuestras carreras profesionales. Además, hacemos un llamado a los estudiantes técnicos, quienes no necesitan pruebas de selección universitaria para ingresar”, afirmó.
La UMAG presentó su Plan Estratégico 2024-2031, que busca transformar el diseño financiero de la institución para alcanzar estabilidad en los próximos años. El foco estará en mejorar la eficiencia operativa, aumentar la captación de estudiantes y garantizar la sostenibilidad de sus programas académicos y de investigación.