El 4 de septiembre de 2004 se marcó un hito en la conservación ambiental mundial con el anuncio de la donación de aproximadamente 300.000 hectáreas en Tierra del Fuego, que dieron origen al Parque Karukinka. Esta área protegida de administración privada fue donada por el Banco de Inversiones Goldman Sachs, tras adquirir los activos de la empresa forestal estadounidense Trillium Corporation. Desde entonces, el parque ha sido gestionado por Wildlife Conservation Society (WCS) Chile, consolidándose como un modelo de conservación en la región.
Karukinka fue creado con el objetivo de preservar la biodiversidad y los ecosistemas que lo habitan, restaurando su calidad ecológica y protegiendo los procesos naturales que los sustentan. Entre sus diversos ecosistemas se encuentran bosques subantárticos, turberas, estepa y costa patagónica, que albergan una rica diversidad de flora, fauna y funga. Además, el parque ofrece servicios ecosistémicos vitales tanto a nivel local como global.
Melissa Carmody, directora del Parque Karukinka, comentó: "Karukinka se ha consolidado como un modelo de conservación efectiva, abierto a la comunidad. A través de nuestros proyectos educativos, programas de voluntariado y los senderos que reciben a cientos de visitantes cada año, hemos logrado que miles de personas se conecten con la biodiversidad y cultura de Tierra del Fuego".
Uno de los logros más destacados de WCS Chile en estos 20 años ha sido la protección de especies clave, como guanacos, albatros de ceja negra y elefantes marinos, mediante programas de investigación, monitoreo y conservación. Además, el parque ha sido fundamental en la lucha contra especies invasoras, como el castor y el visón, que han alterado los ecosistemas locales.
El seremi de Medio Ambiente de Magallanes, Enrique Rebolledo Toro, subrayó la importancia de estas iniciativas privadas: "Destacamos la labor de protección ambiental de organizaciones como WCS Chile, que juegan un papel crucial en la conservación de nuestro medio ambiente en la región".
Uno de los aspectos más emblemáticos del trabajo de WCS Chile ha sido su colaboración con el Pueblo Selk'nam. Desde 2019, la organización ha apoyado a la comunidad en su proceso de "rehabitar" el territorio de sus ancestros. Hema’ny Molina Vargas, presidenta de la Comunidad Selk'nam Covadonga Ona, destacó: "El apoyo de WCS Chile ha sido decisivo en nuestra reconstrucción cultural y en la conservación del medio ambiente, uniendo fuerzas para preservar nuestra historia y biodiversidad".
El Parque Karukinka no solo ha sido un espacio para la conservación ambiental, sino también un lugar de encuentro para la investigación, la educación y el fortalecimiento de los lazos culturales con el territorio. A lo largo de estos 20 años, Karukinka ha sido un ejemplo de cómo la colaboración entre diversos actores puede generar un impacto positivo en la conservación de la naturaleza y el patrimonio cultural.