La víctima no residía en la región, sino que había viajado para visitar a su pareja y a la hija de ambos. La ex pareja de Jorquera no había permitido que la niña de tres años se quedara con él debido a su condena previa por abuso sexual y otra causa pendiente por el mismo delito. Esta decisión provocó la reacción violenta de Jorquera, lo que llevó a que se llamara a Carabineros, terminando en el fatal desenlace.
Durante la audiencia del 10 de julio, la Fiscalía presentó videos que mostraban el uso desmedido de fuerza, destacando que Jorquera recibió nueve disparos a pesar de no haber mostrado agresión activa. Sebastián González, fiscal a cargo de la investigación de ese entonces, señaló que la situación "pudo haberse evitado".
En la audiencia de hoy 7 de agosto, Fernando Dobson, fiscal encargado del caso, informó que la defensa de dos de los tres carabineros solicitó el sobreseimiento definitivo de la causa, argumentando que actuaron en legítima defensa. Sin embargo, la Fiscalía sostiene que aún quedan pendientes diligencias cruciales, como informes técnicos y periciales, que son esenciales para determinar la cantidad y ejecución de los disparos.
Dobson explicó que la investigación aún no lleva un mes de desarrollo y no ha habido variación. Además el estándar para declarar un sobreseimiento en casos de uso de armas por parte de agentes policiales requiere una investigación detallada. Frente a esto la investigación continuará su curso en el plazo de seis meses, debido a la necesidad de enviar evidencias a la región Metropolitana para su análisis.
En este contexto, si se confirma la implicación de los tres carabineros imputados, la Fiscalía ha solicitado penas diferenciadas que van desde presidio perpetuo simple hasta 20 años de cárcel, en función de la gravedad de su participación en los hechos.