El mercado laboral muestra cifras mixtas en medio de la coyuntura económica actual. Según la última encuesta de empleo del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la tasa de desempleo aumentó en 0,7 puntos porcentuales en comparación con el año anterior, alcanzando un 8,5 %, marcando así el séptimo incremento anual consecutivo.
El mismo informe revela una recuperación del empleo asalariado, con un aumento del 3,1 % (199.583 empleos) en el trimestre marzo-mayo. Esta cifra es superior al crecimiento del trimestre febrero-abril, que fue del 1,7 %.
No obstante, los trabajadores por cuenta propia experimentaron una disminución del 0,2 %. Los expertos advierten que es importante monitorear si esta tendencia de recuperación se mantendrá a lo largo del tiempo o si fue un dato puntual.
Por otro lado, los registros administrativos muestran una situación menos positiva. La Dirección del Trabajo publicó un informe mensual de despidos, que reveló que entre enero y junio se contabilizaron 229.589 despidos, lo que representa un incremento del 16 % en comparación con el mismo período del año pasado.
Esta es la mayor alza y el mayor número de despidos por esta causal desde 2020, en plena pandemia.
En comparación con el primer semestre de 2021, los despidos han aumentado un 27 %, cuando se registraron 180.867. No obstante, esta cifra es menor en comparación con los despidos registrados en 2020, cuando se aproximaron a los 300 mil despidos por necesidad de la empresa.
Aumento de despidos
Los expertos consideran que la evolución de los despidos por necesidades de la empresa está estrechamente relacionada con la situación económica y es un indicador relevante para analizar la situación del mercado laboral junto con otros indicadores.
De acuerdo con el Código del Trabajo, el despido por necesidades de la empresa debe estar fundamentado en hechos objetivos que hagan inevitable la separación de uno o más trabajadores, no pudiendo ser una decisión unilateral y discrecional del empleador.
“Los términos de contrato por la causal del artículo 161 Nº1, esto es, por necesidades de la empresa, se asocian a procesos de racionalización o modernización, bajas en la productividad o cambios en las condiciones del mercado o de la economía, que hagan necesaria la separación de uno o más trabajadores”, explica Juan Bravo, director del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP).
Patricio Rojas, economista de Rojas y Asociados, indicó que “los registros administrativos van en línea con las cifras de menor creación de empleo, lo que a su vez es coherente con una economía que se ha ido desacelerando”.
Para Rojas, en el tercer trimestre del año, la economía se mantendrá estancada con una creación de empleo “prácticamente” nula. Por ello, dice que “no me extrañaría que los registros de despido se mantengan en estos niveles”.
“Las cifras del INE muestran una fuerte alza de la cesantía y además que el empleo asalariado informal en el sector privado, esto es, empleos bajo subordinación, pero donde el empleador no paga las cotizaciones de salud o vejez, está teniendo un rol muy relevante en la generación de empleo en conjunto con el empleo asalariado en el sector público”, subraya Bravo.
“Los registros administrativos de cotizantes dependientes de AFP y cotizantes del Seguro de Cesantía muestran caídas interanuales y las vacantes laborales siguen exhibiendo un fuerte desplome respecto al año anterior”, mencionó.
Tercer trimestre
En cuanto a las perspectivas para el tercer trimestre, los expertos proyectan un estancamiento, por lo que se espera que los registros de despidos por necesidad de la empresa se mantengan alrededor de los 30 mil despidos mensuales. Hacia el último cuarto del año, se prevé un repunte en la actividad económica, lo que traerá consigo un aumento en la creación de empleo.
“Hacia la última parte del año es probable que la economía mejore, lo que repercutirá en un repunte en la creación de empleo, pero hasta agosto veremos una situación laboral deteriorada con tasa de desempleo sobre 9%”, sostuvo.
Bravo puntualiza que “la perspectiva es que la actividad vuelva a mostrar tasas de crecimiento positivas en la segunda mitad de 2023, lo que permitirá ir mejorando paulatinamente la situación del mercado laboral, lo que debiera traducirse en que los despidos por necesidades de la empresa comiencen a registrar descensos interanuales hacia fines de este año″.
