La Corte de Apelaciones de San Miguel ha dictaminado que el Estado debe pagar una compensación de $680 millones a la senadora Fabiola Campillai y su familia como resultado de la agresión sufrida por la legisladora durante el estallido social en noviembre de 2019 en San Bernardo.
La sentencia destaca tanto las consecuencias físicas y psicológicas sufridas por la parlamentaria como el impacto traumático experimentado por sus hijas, madre, esposo y hermana.
La resolución
La ministra Celia Catalán Romero ha reconocido el daño moral causado a la parte demandante, compuesta por Campillai y su familia, debido a las acciones del ex capitán de Carabineros, Patricio Maturana.
Es importante recordar que Maturana fue condenado a 12 años y 183 días de prisión efectiva como autor del delito consumado de apremios ilegítimos, causando lesiones graves gravísimas.
“Que de la prueba rendida por la parte demandante se ha acreditado que el daño físico y psicológico que aún presenta Fabiola Campillai y el daño sicológico de su marido, hijas, madre y hermana son consecuencia directa de los hechos acreditados en esta causa, detrimento que permanece a la fecha en los demandantes”, sostiene el fallo.
Consecuencias físicas y psicológicas
La resolución agrega que “la agresión sufrida por Fabiola Campillai implicó un quiebre en su historia vital, impactando gravemente el plano físico, psicológico, funcional, social y familiar”.
En cuanto a lo físico, a consecuencia de estos hechos, “estuvo en riesgo vital, perdió el sentido de la vista, gusto y olfato, debió someterse a numerosos procedimientos quirúrgicos y de rehabilitación, padeciendo dolor en forma sistemática, resultando con secuelas estéticas permanentes en su rostro y cabeza”.
En el plano sicológico, la legisladora sufrió “constante miedo a enfrentar su nueva vida y entorno, lo que la condujo a una profunda depresión”.
En lo funcional, al perder sus tres sentidos, se volvió dependiente de su marido e hijas, “debiendo desarrollar nuevas habilidades para enfrentar su nueva vida, lo que repercutió en su vinculación con el entorno ajeno al familiar, manifestando miedo incluso a salir a la calle”.
Lo anterior afectó gravemente a su núcleo familiar cercano, “provocando en ellos aflicción, depresión y temor ante la evolución incierta de salud de su esposa, madre, hija y hermana, viendo truncados sus proyectos de vida personales ante la necesidad de asistencia en todo aspecto de Fabiola Campillai”.
Millonaria indemnización
La Corte de Apelaciones de San Miguel ha determinado las siguientes indemnizaciones por concepto de daño moral: $300 millones para la legisladora, $100 millones para su cónyuge, $100 millones para su hermana, $80 millones para su madre y $50 millones para cada una de sus hijas. Estos montos han sido establecidos como compensación por los perjuicios sufridos por cada miembro de la familia como consecuencia de los hechos ocurridos durante el estallido social en noviembre de 2019.
